El TAS falló en contra de la atleta sudafricana que produce mucha testosterona y deberá medicarse para competir como mujer

La atleta sudafricana Caster Semenya perdió su batalla legal con la Federación Internacional de Atletismo (IAAF). El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha fallado en contra de su reclamo, por lo que deberá controlar sus altos niveles de testosteronacon medicación para competir en pruebas femeninas.

Caster Semenya tiene complicada su participación en los Mundiales de Doha (REUTERS/Paul Childs)

Semenya es doble campeona olímpica y triple mundial de 800 metros.

Ella, como otras mujeres con hiperandrogenismo,  tendrían que competir en la modalidad masculina, de no aceptar un tratamiento hormonal.

La disputa se inició por la nuevas normas anunciadas hace un año por la IAAF para limitar el acceso de atletas como Semenya, de 28 años, a las pruebas femeninas de entre 400 y 1.500 metros. La entidad sostenía que estas normativas eran necesarias para reducir las ventajas físicas que presentan atletas como la sudafricana, ya que la testosterona, cuyos niveles son normalmente mayores en hombres que en mujeres, contribuye a mayor masa muscular y fuerza.

La atleta apoyada por la federación de atletismo de su país, organizaciones feministas y de Derechos Humanos alegaba que los niveles de testosterona en su cuerpo, son de nacimiento y no provienen de una práctica ilegal o de dopaje y que debido a eso el TAS la discriminaba.

Los problemas entre la IAAF y Semeya comenzaron hace una década. Cuando la atleta fue obligada a demostrar que era una mujer. Semeya tuvo que sufrir la humillación de ser inspeccionada porque su cuerpo no se ajustaba a los estereotipos. Dejó por muchos meses de competir luego de lo ocurrido.